Mi historia con escape rooms I

27 de mayo de 2024

Mi familia fue muy pobre, nací en un pueblo de 400 habitantes. Mis padres no pudieron comprarme juguetes, por eso los hacíamos nosotros mismos.

Jugaba con lo que encontrábamos en el bosque: por ejemplo, encima de un palo pusimos bolas de barro y los tiramos sobre la pared de la casa de nuestra vecina anciana. Fue un reto súper guay entre el hijo de otro vecino y yo.

Ganaba quién podía tirarlos lo más lejos posible, bien pegados a la pared. Jajajaj… fue muy divertido. Estuvimos muy orgullosos de lo que hacíamos, hasta que después de la jornada laboral, llegaba mi madre agotada a casa y veía nuestro “reto”. Veíamos cómo cambiaba el color de su cara a rojo.

Mi historia con escape rooms

Bueno, tuve mucha energía, como los niños tienen siempre. Pero ¿dónde desapareció esta energía al ser adultos?

¿Has pensado en esto? Quiero tener la energía como los niños. Toda mi vida estuve buscando el secreto de tanta energía de los niños.